domingo, 24 de abril de 2011

La Carpa o la Vida

A modo de ejemplo. Este no es el pescador de la historia
Si no fuera trágico, parecería cómico. Hoy hemos salido en bici por la mota izquierda del río Segura en dirección al mar Mediterráneo aunque sin la pretensión de llegar a él, cuando al poco de iniciar el recorrido, hemos hecho un alto en el camino al ver los esfuerzos de un pescador en la orilla contraria por hacerse con una hermosa carpa enganchada en su anzuelo.

Con mucha dificultad había conseguido medio introducirla en un salabre y luchaba denodadamente para desenredar el sedal de las cañas circundantes, del salabre y hasta de su propio cuerpo. Tumbado y boca abajo, con una mano sujetaba el salabre y con la otra y los dientes intentaba desembarazarse del hilo. Cada vez lo tenía más difícil, pero no cejaba en su esfuerzo por no perder la presa, mientras se deslizaba lentamente sobre las cañas de la orilla, hacia el fango del río.

Varios paseantes observaban ya la escena y mascullaban entre dientes ¡se va al agua!, ¡se va al agua! El hombre no parecía darse cuenta de su situación, tan encelado en su presa estaba, que intentaba posturas cada vez más inverosímiles para desembarazarse del sedal sin soltar el salabre y su trofeo. Como a cámara lenta llegó el inevitable chapuzón; terminó de resbalar y fue de cabeza al agua y ahí comenzó el conato de tragedia. Tan ensimismado estaba en su lucha, que no se había percatado del peligro; tras el buche inicial, comienza un frenético braceo intentando asirse a la orilla que se le escapa, no hace pie hundiéndose en el fango, unos gritos de pánico sofocado indican que la cosa pinta mal.

Los de esta orilla nos miramos indecisos ¿vamos?, el caudal es exiguo pero el fango del lecho traicionero; antes de iniciar el descenso, dos providenciales ciclistas en la orilla opuesta sueltan sus bicicletas y se lanzan a la carrera por la corta pendiente, justo a tiempo de echar mano al infeliz al que no sin dificultad consiguen arrastrar fuera del agua. Un suspiro de alivio nos recorre, ¡no sabía nadar!, ¿habéis visto? ¡no sabía nadar!

Los oportunos salvadores se cercioran de que el hombre está bien, remojado pero bien, antes de regresar con sus monturas. Todos emprendemos la marcha, aunque no dejo de pensar que el pescador, una vez pasado el susto no querrá abandonar la presa y lo mismo la próxima vez la divina providencia no le envía dos ángeles guardianes. Con esa certidumbre vuelvo la cabeza para comprobar con alivio que el mismo pensamiento ha llevado a regresar a los ciclistas junto al hombre para terminar la misión que esta mañana se les había encomendado: salvar una vida.

sábado, 23 de abril de 2011

Mona de Pascua

Mona de Pascua
¡Solo de verla en el escaparate se te hace la boca agua!  Esto es repostería de toda la vida, de la que no falla. Confitería El Cisne, calle Ceballos, Murcia, España. 

jueves, 21 de abril de 2011

El Nogal. Inazares

El Nogal. Inazares (Murcia)
¿Qué puede hacer un urbanita recalcitrante cuando amanece un día de fiesta soleado?

Muy fácil, ponerse el chándal, calzarse las deportivas de bajar a por el periódico y acercarse a la churrería de camino al kiosco, antes de pasar toda la mañana tumbado a la bartola hojeando la prensa a la espera de la hora del aperitivo cervecero, para después comer con poca gana y tomar una reparadora siesta, tras la cual, la película de la tarde de paso a la hora de la cena y con esta a la segunda sesión televisiva y a la cama para recuperarse del ajetreado día.

Y también puede, si vive en Murcia o sus alrededores, levantarse tempranito, colocarse un atuendo cómodo y campestre, con la precaución de llevar algo por si refresca y enfilar en coche, desde Murcia, la autovía C-415 hacia Caravaca de la Cruz, para continuar por la carretera C-330 de Granada, pasando por Barranda en dirección a la Puebla de Don Fadrique, y en llegando a un cruce en el que un cartel indica a la derecha la población de Inazares, tomar en su dirección y llegar al Caserío de Inazares, localidad murciana que goza del privilegio de ser la situada a mayor altura de la Región, 1.350 metros de altitud, a los pies del macizo de Revolcadores.

Se puede ir a pasar el día o de fin de semana, ya que Inazares cuenta con un complejo de casas rurales, o si se es amigo de José Ramón Carabante, conocido empresario y patrón de la escudería de fórmula 1 Hispania Racing F-1 Team, puede alojarse en su impresionante mansión en una ladera, más grande que todo el caserío.

En todo caso, una vez allí, se impone un paseíto por los alrededores respirando el aire puro de la montaña para abrir boca y despertar el apetito y cuando comiencen a sonar las tripas y la garganta empiece a sugerir con insistencia una cervecita, habrá llegado el momento de acercarse al Bar Restaurante El Nogal y dar rienda suelta a los placeres de la carne, preferentemente a la brasa, sin olvidar, ni por un momento, probar el lomo de orza y el venado en salsa, que están de quitar el hipo. Si hace bueno, comer bajo el nogal de la terraza es un lujo con la sierra de fondo y los gorriones morunos disputando las últimas migajas. Otro paseo al atardecer llevará a la cuadratura del círculo de un día de fiesta perfecto. No suele ser necesario reservar mesa, aunque tiene teléfono y está en internet.

También se puede llegar por pistas forestales atravesando la sierra camino de la Ermita de la Rogativa, pero esa será otra historia y mientras tanto, ¿Ya sabes qué hacer en un día de fiesta soleado?

miércoles, 20 de abril de 2011

Cazadores cazados

Modelo 1

Modelo 2

Modelo 3

Modelo 4
Hace no mucho me enteré de que las firmas de moda se inspiran a menudo en la gente de la calle para crear nuevas tendencias cada temporada. Las personas que pasean por las calles de cualquier ciudad del mundo se convierten de repente en improvisados modelos de los inquisitivos fotógrafos que los asaltan, encuandrándolos ante cualquier fondo neutro para resaltar mejor sus atuendos.

Indagando un poco más he averiguado que a la moda de calle también se la conoce como streetstyle, el estilo de la calle. Muchas revistas y páginas web de moda salen a la calle a fotografiar a la gente y a preguntarles por las marcas de la ropa que llevan. Y parece que a la gente le gusta posar, pues se prestan encantados ante la propuesta de los fotógrafos a la caza de modelos anónimos.

Bueno, pues algunos rizamos el rizo y nos damos el gusto de observar a los observadores, que sin darse cuenta, se convierten en cazadores cazados. Cazados por el objetivo indiscreto que te permite ponerte detrás del espejo y convertir en protagonistas de tu historia a los que buscan protagonistas de la suya.

Ellos hacen su trabajo mientras yo disfruto de mi hobby y los modelos improvisados se transforman por un momento en actores secundarios, mientras, la vida transcurre como siempre, desde muchos puntos de vista. Solo hay que estar atento al objetivo.

martes, 19 de abril de 2011

El Patriota ¿de donde?

Puesta en escena

Arenga a las masas

Salida triunfal
La Plaza Mayor de Madrid está viva y muy viva, tanto es así que en cualquiera de sus esquinas, de sus soportales, de sus luces y sus sombras hay una historia diferente. Allí la señora mayor del pelo revuelto haciendo caricaturas del que se presta por un módico precio; más allá un guitarrista flamenco con greñas y sombrero a lo Sabina pone sus notas al brioso y poco artístico baile de su acompañante de faralaes.

Pintores, mendigos, comediantes, estatuas humanas, turistas, camareros a la caza de clientes, clientes recelosos de los camareros y en el centro, dominando la situación, Felipe III a caballo, por derecho propio, pues fue él quién ordenó construir la plaza, contempla desde las alturas el bullicio constante a su alrededor.

Cualquiera con un poco de arte o un mucho de cara se puede ganar bien la vida en ella. La flamenca pasa la caja tras sus bailes gitanos a los turistas que la inmortalizan con sus cámaras o la observan desde las terrazas; la estatua humana con forma de cabra con flecos multicolores intenta atraer a los curiosos para arrancarles unas monedas; la anciana de las caricaturas recién termina una obra y tras cobrar, ya está ofreciendo sus servicios en la mesa contigua y los camareros solícitos acomodan poco a poco a los comensales que les llegan.

Y en medio de este pandemónium aparece un peculiar personaje en bicicleta, con vestimenta informal, tocado con una gorra que le da un cierto aspecto marcial, enarbola una tremenda bandera coronada por un cartel con mensaje y porta un megáfono en bandolera. Se detiene, echa mano de su megáfono y lanza un enérgico e indescifrable discurso ante el asombro de los colindantes.

Antes de que nadie pueda cerrar la boca, el buen hombre cabalga de nuevo y se aleja ondeando su bandera ante la atónita mirada de un grupo de jovenzuelos en viaje de estudios, que no alcanzan a entender si lo que acaban de presenciar es una actuación más de un artista callejero, o los desvaríos de un pobre perturbado. Ellos seguro que se quedan con la primera opción ¿Qué necesidad hay de elegir la segunda si a la postre su actuación no perjudica a nadie?

lunes, 18 de abril de 2011

Aquí te pillo ...


Saltamontes (Caelifera)

Langostas

Pareja de saltamontes/langostas aprovechando el tiempo

Así de primeras, los saltamontes no son de esos bichos adorables que te llevarías a casa porque te enamoran con su encanto. Es más, se de quién posee una especie de radar que los detecta aún antes de que se le acerquen, como a las cucarachas, y le permite dar un rodeo a una prudencial distancia de ellos.

Si los observas de cerca, y te dejan, ves una especie de máquina acorazada que con toda seguridad ha servido de modelo a más de un monstruo de película y que solo de pensar en sus antepasados prehistóricos con un tamaño cien veces superior al actual, se te ponen las antenas tiesas.

Los antepasados de estos fueron los que se zamparon los campos del Faraón en la plaga bíblica, arrasando con todo y desde entonces su aparición en masa no presagia nada bueno. Menos mal que los chinos se los comen, porque son muchos y así mantienen controlada la población (digo yo), y hablando de gustos, con absoluto respeto por los gustos chinos y demás orientales, yo personalmente prefiero los saltamontes marinos en cualquiera de sus versiones: gambas, langostinos, carabineros, bogavantes, cigalas o sus primas las langostas de mar.

Volviendo al tema, estos dos están cumpliendo con su deber, que es aparearse convenientemente y como la naturaleza es muy sabia, el grande hace de madre y el pequeño de padre. Eso sí, se lo toman con tiempo, ni un gesto, ni una palabra más alta que otra, ni un movimiento fuera de lugar, sin concesiones a la galería, ni una sonrisa, ni siquiera una mueca. Nada, solo concentración y la mirada fija en el infinito de esos ojos soñadores con los que se declaran la fidelidad del momento.

Y ahí están, haciendo el amor en público, desnudos y con cara de circunstancias, como solo un saltamontes sabe ponerla. Si disfrutan o no solo lo podremos averiguar por el lenguaje de sus antenas y ¿quién lo conoce?

domingo, 17 de abril de 2011

Atardecer 1º

Atardecer en .... Murcia

Puesta de sol ... en Murcia

Cuando una tarde tienes tiempo para disfrutar un rato viendo la caída del sol en el horizonte, junto con la riqueza cromática que este espectáculo cotidiano te ofrece, debes estar agradecido a la naturaleza que te la muestra, a tu suerte que te lo permite y a ti mismo por buscarla.

No todos los días te puedes permitir el lujo de subir a una loma y esperar a que el Astro Rey desaparezca lentamente entre el murmullo del viento, el aroma del azahar de los naranjos y los últimos cantos del ruiseñor que lo despide.

Es un momento mágico, durante el cual se amortiguan los sonidos, se funden los colores, se alargan las sombras y la realidad pasa a ser otra. Todo cambia, todo se transforma y tú estás allí, protagonista y espectador a la vez del último Acto del Día y primero de la Noche, en la diaria representación de la Vida. ¡Qué suerte! 

jueves, 7 de abril de 2011

El Municipal de la calle Ceballos

Calle Ceballos. Murcia. 1
Para los murcianos, la calle Ceballos no tiene pérdida: es la que va desde la Convalecencia y la Delegación del Gobierno, hasta la esquina de la Comisaría de Policía; para los de fuera, es un calle de única dirección con dos carriles, dos aceras y prohibido aparcar en toda ella.

Bueno, pues lo de prohibido aparcar parece que no vaya con esta calle, ya que el carril de la derecha, siempre, absolutamente siempre, está ocupado por una docena de automóviles convenientemente arrimados a la acera. Ninguno de ellos parece ser vehículo de emergencia, algunos son coches policiales y bueno que va, pero el resto no tienen identificación alguna, ni de médico de urgencia, ni de minusválido, ni del Sursum Corda. Por no tener, no tienen ni el doble intermitente encendido para disimular un estacionamiento rápido. Con el agravante de que en las horas punta, dicha calle recoge una gran afluencia de tráfico y se crea un magnífico embudo al quedar útil un solo carril.

Calle Ceballos. Murcia. 2
En cualquier otra calle de la Ciudad, los transgresores serían cosidos a denuncias con sus correspondientes multas de 100 €, pero en esta, no solo no se multa, sino que la mayoría de los días, un policía local se sitúa al final del embudo, en el paso de cebra existente frente a la Comisaría, ¡Para agilizar el tráfico!, haciendo la vista gorda del nutrido parque móvil que dificulta el tránsito por la calle y que de no existir, haría innecesaria su presencia.

Algún avispado pensará que no se multan esos coches porque pertenecen al personal adscrito a la Comisaría y que necesitan tener su vehículo a mano; quizá eso sea así, pero en ese caso, y previa solicitud al Ayuntamiento, este podría habilitar la zona para estacionamiento de vehículos oficiales y señalizarla adecuadamente, de modo que cuando los sufridos conductores nos veamos inmersos en el embudo, sepamos a qué atenernos sin acordarnos de la madre de los espabilados que un día sí y otro también colapsan la calle Ceballos por la cara.

¡O todos moros, o todos cristianos! (Expresión que se utiliza coloquialmente para oponerse a los privilegios o los tratos diferenciados, indicando que todos deben verse afectados por igual, en cosa buena o mala)

miércoles, 6 de abril de 2011

La anciana chatarrera


Fibra óptica
 Leyendo la prensa en Internet, además de las noticias cotidianas, de vez en cuando te encuentras joyas como la de la anciana georgiana que tijeras en mano liquida el cable de fibra óptica entre Georgia y Armenia, dejando al 90 % los armenios a la Luna de Valencia sin Internet durante medio día, que con toda seguridad supieron dedicar a menesteres igualmente interesantes.

Pondría la mano en el fuego, sin riesgo a quemarme, a que dentro de nueve meses nacerán un buen número de armenios chiquitos gracias al apagón informático de la abuela chatarrera. Esta es la noticia:

Detenida una mujer de 75 años tras dejar a Armenia sin conexión a Internet. Buscaba chatarra.

Afp. Tbilisi

Una georgiana de 75 años de edad ha sido detenida por cortar la conexión de Internet de la totalidad de Armenia.

Cable de fibra óptica
El pasado 28 de marzo la jubilada descubrió el cable de fibra óptica que suministra la conexión web entre Georgia y Armenia mientras buscaba chatarra. Reconociendo el valor del cobre contenido en el cable, la anciana decidió cortar y robarlo, y al hacerlo interrumpió el servicio de miles de usuarios en el país vecino.

"Al cortar el cable, desconectó a miles de personas", confirma Zura Gvenetadze, portavoz del Ministerio del Interior de Georgia. La señora fue detenida hace unos días, acusada de dañar propiedad estatal, pero Gvenetadze dice que "se ha tomado en consideración su edad avanzada, y se le ha puesto en libertad hasta que se celebre el juicio". Si se la juzga culpable del delito, la jubilada podría pasar tres años en prisión.

La empresa que mantiene el cable, Georgian Telecom, dice que el daño al sistema informativo nacional fue serio, y que el 90% de los usuarios en Armenia se encontraron sin conexión a la Web durante casi 12 horas. "No entiendo como logró encontrar el cable", asegura el jefe de marketing de la empresa, Giorgi Ionatamishvili. "Está enterrado en el suelo".

En 2009 los internautas de la ex república soviética también se encontraron desconectados tras producirse una situación idéntica en la que un chatarrero encontró otro cable y decidió intentar robarlo.

Lo dicho, una joyica informativa que dibuja una sonrisa en el lector entre tantos sapos y culebras que nos tragamos a diario, aunque sea a costa del disgusto que se han llevado los armenios al no poder navegar en los procelosos mares ópticos de Internet por un día. A ver si los de la Georgian Telecom se gastan algo más de pasta y entierran sus cables más profundo a salvo de abuelas y chatarreros.

En cuanto a por qué la anciana está tan puesta en el valor del cobre, esa es otra historia que otro día vendrá a cuento. Y colorín colorado...

Fotos: Internet

Mezquindad informativa


Ya me ha pasado varias veces, y sobre todo con el futbol. ¿Que qué me ha pasado?, pues que me entero por los pelos de cuando se juega el Real Madrid o cualesquiera otro equipo, su ser o no ser en la Champions.

Me explico: como ahora disfrutamos de multipluralidad informativa televisiva, vamos, que hay más cadenas que botones en el mando multiplicados por diez, uno pensaría que la información nos saldría a borbotones por las orejas; pues no, naranjas de la China, si el partido de octavos en el que se juegan la temporada lo retransmite TVE, el resto de las cadenas se dedica a hablar de los mustélidos con pintas en el lomo durante el espacio de deportes. Que le toca retransmitir a Tele5, A3 o la Sexta, pues tres cuartos de lo mismo del resto de no agraciadas, que en su espacios deportivos hablan de lo divino y lo humano, menos del dichoso partido. Y con los partidos de cuartos, para qué contar, que el de hoy lo he enganchado por los pelos en el descanso.


Conclusión: No es que hace 40 años viviéramos mejor, o sí, que eso allá cada cual, e incluso después, con el espacio radioeléctrico más despejado; lo que sí era impepinable es que te enterabas de cuando había partido de los buenos: te lo ponían por la tele, te lo chupabas entero sin letreritos por medio, y no estabas al albur del mezquino de turno que si no tiene el juguete, se enfurruña y lo esconde para que los demás no lo disfruten, y jorobarle el share a la competencia.

Y así con tantas cosas. ¿Y estos quieren que nos creamos lo de la información profesional, objetiva y veraz? ¡Amos anda ya!, que diría el castizo.

Fotos: Internet