domingo, 27 de febrero de 2011

Emparedada

Torre desde la calle La Fuensanta
Si hay algo que destaca en el horizonte murciano cuando te acercas a la ciudad por cualquiera de sus cuatro puntos cardinales, ese algo es la Torre de la Catedral, que con sus 98 metros a la punta de la veleta, hasta hace muy poco constituía el referente indiscutible en el skyline murciano. Renacentista, plateresco, barroco, rococó y neoclásico, son los estilos arquitectónicos que se superponen a lo largo de los más de dos siglos y medio que llevó su construcción.

Además de torre, es campanario, nada menos que 25 campanas se alojan en su interior, cada una con su nombre, desde la más antigua, La Mora, hasta la última, La Nueva, y que con su tañido llevaron y llevan hasta los confines de la huerta el anuncio de riadas, guerras, defunciones, celebraciones y fiestas, vamos, como el twitter o el facebook de ahora.

La última vez que subí a la Torre de la Catedral fue hace muchos, muchos años, con la intención de tirarle los tejos a una moza en la soledad de sus alturas. La jugada no me salió como esperaba, porque apareció guarnecida por una nutrida parentela que me impidió dar rienda suelta a mis anhelos. La moza se escurrió en aquel momento, y bajé con las orejas gachas y calambres en los gemelos, pero con el tiempo acabó sucumbiendo a mis múltiples encantos, tal como me había sucedido a mí con los suyos.

Cuando todas las mañanas paso presuroso por la intersección entre las calles Isidoro de La Cierva y La Fuensanta, no dejo de echar una fugaz mirada a la torre que al fondo se aparece, emparedada entre dos anodinos bloques de hormigón y cristal que aún resaltan más su belleza de caliza dorada y me recuerda aquel fugaz asalto de juventud.

A mi chica.

Flor de febrero

Almendro. Prunus dulcis, prunus amygdalus.
Magnífico ejemplar de almendro de más de siete metros de altura y en plena floración a finales de febrero. De la familia de las rosáceas, los almendros engalan tradicionalmente los campos durante los meses de enero y  febrero con sus vistosas flores rosas y blancas, segun las variedades. 

PRINCIPALES VARIEDADES DE ALMENDRO CULTIVADAS EN ESPAÑA

Son muchas las variedades cultivadas, no obstante, las almendras dulces pueden clasificarse en dos grupos, las de cáscara blanda llamadas 'mollares' y las de cáscara dura.

- Marcona. Cáscara dura. Maduración tardía. Polinización cruzada. Mazapán y turrón.
- Largueta. Cáscara dura. Semilla alargada. Floración precoz y maduración semitardía. Polinización cruzada. Chocolates y almendras tostadas con piel.
- Planeta. Cáscara dura. Algo menos alargada que la largueta. Utilizada para elaborar almendras garrapiñadas con azúcar.
- Mallorca. Es realmente un conglomerado de variedades. Cáscara dura. Turrón y mazapán. Leche de almendras.
- Valencias (Comunas). Otro conglomerado de variedades. Cáscara dura. Utilizada en pastelería (bastones, trozos, láminas, granillo, harina...).
- Mollares. Cáscara blanda. La principal variedad es Mollar de Tarragona. Se vende con la cáscara para consumo directo. Peligro de ataques de insectos y de hongos
- Fitas. Almendras de Ibiza, cáscara semiblanda, mezcla de variedades.
- Desmayo rojo. Fruto grueso, alargado y rosado, cáscara dura. Floración tardía.

OTRAS VARIEDADES ESPAÑOLAS (o adaptadas)

(D = dura, SD = semidura, SB = semiblanda, B = blanda)

- Antoñeta (D).   - Atocha (D).   - Ayles (D).   - Bertina (D).   - Blanquerna (D).   - Cambra (D).   - Cristomorto (D).   - Esperanza (D).   - Ferraduel (D).   - Ferragnes (SD).   - Garrigues (D).    - Guara (B).   - Jordana (D).   - Moncayo (D).   - Non pareil (B).   - Tuono (D).

Las variedades Antoñeta, Marta, Penta y Tardona, han sido obtenidas por el CEBAS-CESIC en Murcia, siendo especialmente resistentes a las heladas.

http://www.cebas.csic.es/pag-general/web_cebas/cebas/noticia1_es.htm

http://www.dicat.csic.es/rdcsic/rdcsicesp/rdbi32esp.htm