ELMUNDO.es | Efe | Madrid
El niño que nació en la sala de
espera de una oficina de empleo de Madrid el pasado miércoles se llamará Inem,
según informaron sus padres, de nacionalidad nigeriana.
Clarice, la madre, una cocinera
nigeriana de unos 40 años y que tiene ya varios hijos, reside en España desde
hace algunos años. "Su padre le ha puesto Inem", explicaba en el
hospital Clarice, que asegura que "no se esperaba el parto; ocurrió todo
muy rápido; fue como una película". La mujer estaba en la semana 35 de
gestación.
Una médico brasileña que iba a
apuntarse al paro fue la que atendió el sorprendente parto en una oficina de
Alcorcón.
"Fue todo muy rápido, vi que
rompía aguas y me lancé", declaró Simone Cristina Saurim, la médico que,
junto a algunas personas que estaban en la misma oficina, atendió con
éxito a la mujer, que iba también a solicitar la prestación por desempleo.
Con la ayuda de dos mujeres,
improvisadas comadronas, Simone atendió el parto, que se desarrolló con rapidez
y que ella calcula que duró total diez minutos.
Vaya que sí, en la cola del paro,
de madre nigeriana, doctora brasileña y comadronas aficionadas. ¡Peliculón de sobremesa! Y al padre no
se le ocurre otra cosa que ponerle de nombre INEM, o sea, Infante Nacido Entre
Mesas, porque no creo que la idea fuera llamarle Instituto Nacional de Empleo.
¿Y qué pasará cuando el chiquillo acuda al cole y la “seño”
lo saque a la pizarra?
- A ver, INEM, la lista de los reyes godos. (Por decir algo que ya ni
se enseña)
- Señorita, yo solo me se la lista del paro...
Ya me estoy imaginando el
pitorreo cuando dentro de 18 años, si Dios y nuestros políticos –por este
orden- no lo remedian, el bueno de INEM acuda a la oficina del INEM para
apuntarse al paro, y le pregunten el nombre. Se va a acordar del ocurrente de
su padre para los restos.
¡Con lo fácil que habría sido
llamarle Alcorcón!
¡Señor, que tropa!