viernes, 27 de mayo de 2011

Aquí una multa, aquí una moto. Aquí un amigo

Motocicleta Custom Hand Made

Estás en esas que protestas por una multa hasta la extenuación, a sabiendas que en algún momento años ha cometiste una involuntaria infracción. No protestas por la multa, protestas por la alevosía con que el radar de Tarancón en Cuenca se cobra sus víctimas; protestas porque cuando el cartero va a tu casa con la notificación, siempre lo hace cuando no estás y te deja un aviso, y en ocasiones, ni eso; protestas porque te enteras tarde del periodo voluntario para identificar al conductor y resulta que no has querido hacerlo; protestas porque te notifican a través del Boletín Oficial de la Provincia de Cuenca, que al estar en ignorado paradero, este es el medio más adecuado para que te enteres de que no has identificado al conductor, debidamente requerido para ello, -como todo el mundo sabe, el B.O.P. de Cuenca está en el Hit Parade de las publicaciones más leídas en nuestro país, junto con El País; protestas porque por muchas alegaciones, recursos ordinarios y extraordinarios, al final, hacen oídos sordos y te remiten a la Agencia Tributaria para que te funda.

Custom

Y estás que protestas y llegas cargado de razones y mal café a la Jefatura de Tráfico de Murcia, y te encuentras al Sheriff  del lugar, el Jefe Provincial de la cosa, sentadito en un banco de piedra a la entrada de su negocio, departiendo con un ciudadano, que le cuenta sus cuitas y que además es amigo suyo. Lo de ser amigo de Paco Jiménez no tiene el menor mérito, no serlo es prácticamente imposible y ya hay que ser revirado para que no te caiga bien. Es un maño cachazudo y socarrón, de conversación fácil e inteligencia desmesurada, que lo único que se le ha ido subiendo a la cabeza en su escalada por el escalafón, han sido las canas que ya le afloran.

Moto guapa
Y le cuentas, y te escucha, y protestas y te comprende, porque él es así, en la Jefatura de Tráfico, o en el parque debajo de su casa; no cambia por ponerse el traje de faena y ajustarse el nudo de la corbata y eso es lo que me gusta de él, eso y su cercanía, su buen talante, su ser como es sin pleitesías ni ringorangos. Solo espero que cuando los nuevos vientos remuevan al personal de confianza, los que vengan con la escoba sepan separar el grano de la paja y que Paco, como buen grano que es, pueda seguir fructificando donde mejor sabe hacerlo y si es más arriba, mejor, porque quizá consiga racionalizar su negocio y acallar algunas de las muchas protestas que su funcionamiento genera.

Y presentas tu enésimo escrito esperando esquivar el pago de la injusta sanción, y te despides del amigo y en la puerta te paras porque hay una moto chula aparcada en la acera y mientras la admiras y le haces unas fotos, comentando con el que pasa por allí ¡qué moto más guapa!, se te pasa un poco el cabreo y te vas tan contento por tener un amigo cojonudo, de esos que ya te gustaría arrastrar desde la infancia.

1 comentario:

Juan Guillamón dijo...

Ponme en la lista de los que quieren y admiran a Paco Jiménez.